PLANCHAS GHD

¿Realmente son para tanto?

Es curiosa la fama que está adquiriendo esta marca de planchas del pelo. Compartiréis conmigo que se han llegado a convertir en un indispensable de belleza, y no hay mujer que luzca pelo liso que no hable de ellas con auténtica devoción.

Y en mi afán periodístico de investigación  y de compartir con vosotras si tal fama es debida a un resultado realmente efectivo o a una ingeniosísima campaña de márketing…me he comprado unas, las he probado y aquí va mi opinión. (170 euracos nada menos).

La verdad es que toda la parafernalia que rodea a las GHD es realmente fascinante y te embelesa quieras o no desde el minuto uno: hay que comprarlas solo en lugares “autorizados”, su precio triplica el de cualquier plancha convencional, al recibirlas tienes que “autentificarlas” en su web para asegurarte de que no son una burda imitación y además cada mes aparecen en el mercado  “Ediciónes Limitadas” que te harán sentir afortunada y especial si consigues que un ejemplar llegue a tus manos. En fin, antes de probarlas, ser  propietaria de unas GHD  ya te hace sentir especial...

Ahora a lo que vamos. ¿Realmente merece la pena gastar 200 euros en dichas planchas sabiendo que en el mercado existen buenas marcas y diseños por la mitad de precio?  Pues voy a dar una respuesta que siempre me ha dado bastante rabia escuchar, pero que ahora es la más apropiada mal que me pese: DEPENDE.

¿De qué depende?

Si te alisas el pelo a diario: definitivamente sí valen la pena respecto al resto, aunque solo sea por su excelente servicio postventa y sus pequeños detalles que las hacen cómodas y te simplifican la vida: rapidísimo calentamiento, diseño súper chulo, apagado automático, pesan poco, el brillo que te dejan en el pelo es realmente exquisito y estropean muy poco el cabello en tu ardua batalla diaria contra los rizos.

Si te alisas el pelo eventualmente: realmente no creo que notes la diferencia con unas planchas Rowenta o Phillips profesionales y que te costarán menos de la mitad. Éstas últimas también están muy desarrolladas y te dejarán un pelo espectacular. No tienes riesgo de quemarte el cabello ya que tu uso es eventual, de modo que te ahorras más de 100 euros y tendrás el pelo igual de bien. No obstante, a modo de capricho no está mal tenerlas si te lo puedes permitir.

Si te alisas el pelo en ocasiones especiales: definitivamente no te compensa comprarte unas GHD. Cierto es que dejan un brillo fabuloso pero eso se aprecia cuando tienes el pelo chamuscado de tanto pasarte la plancha. En un pelo sin sometimiento, esos detalles no se perciben respecto a unas planchas estándar.  Con unas de 50 euros estarás igual de contenta y tu pelo no se resentirá.

Y hasta aquí mi opinión. Las planchas GHD son la leche, pero una Phillips o Rowenta son igual de buenas. Quizás no tienen un diseño tan embriagador, pero cumplen su función a la perfección.

En GHD también pagas el diseño y la fama. Que no es inmerecida, pero sí opino que algo exagerada.

¡¡Aún así, si tienes pelas, hazte con unas GHD!! Te harán sentir mejor y al fin y al cabo ese es el objetivo de invertir en belleza… ¿no?